Octli, neuhtli, tlachicotón, chínguere, el elixir de los dioses o como usted quiera llamarlo, el pulque es una de las bebidas más emblemáticas de nuestro país, ya que fueron nuestros antepasados prehispánicos los que se encargaron de crear esta bebida que marcó generaciones, tanto en la grandes ciudades como en los pueblos más humildes.
Como aporte cultural, los magueyales de los Llanos de Apan y del Valle del Mezquital han producido los mejores pulques desde que se tiene memoria, obtenido de las pencas del maguey cuando la planta está madura. Para ello, se le arranca la yema o corazón y sus paredes se raspan hasta lograr una cavidad, de la que, unos días después, manará el aguamiel de las pencas durante un periodo que va de tres a seis meses.
El tlachiquero es el encargado de la extraer el líquido por medio de succión con un acocote, dos o tres veces al día, y de depositarlo en un cuero de pulque, o en una castaña, anteriormente hecha de madera y en la actualidad de fibra de vidrio, para después vaciarlo en el tinacal, donde se fermenta. El aguamiel sin fermentar es un delicioso refresco, dulce y transparente.
Una vez fermentado se convierte en octli o pulque, bebida embriagante que aún hoy en día se consume en muchos pueblos. Para hacerlo más atractivo lo han combinado con frutas para hacer los curados que pueden ser de guayaba, mango, fresa, nuez , mamey y muchos otros más; al igual que el tequila o el mezcal, el pulque les gusta mucho a los turistas.
Aquí en San Luis Potosí, Olivia es una de las emprendedoras que busca regresar el pulque al gusto de los potosinos, por lo que creó su propio negocio de venta de pulque y curados, los cuales han tenido gran aceptación por los diferentes sabores que ofrece en el establecimiento y en el servicio a domicilio.
Olivia habló para codigosanluis.com y nos compartió que el proyecto de Coneja de la Luna surge como una propuesta familiar, ya que su hermano también está atrás de la realización de las bebidas y del preparado exacto.
En este sentido, Olivia comentó que también es una actividad cultural, por lo que busca que la reintroducción de esta bebida a la gastronomía mexicana se haga desde una perspectiva histórica, de identidad y de valoración por los recursos naturales que existen en nuestra tierra mexicana.
Aquí en la entidad potosina, continuó compartiendo Olivia, «Mexquitic es uno de los municipios donde tradicionalmente se consume mucho el pulque, específicamente en la comunidad de Monte Oscuro», por lo que los habitantes de dicha zona, que no está muy alejada de la capital, pudieron haber traído el gusto del octli a la ciudad, expandiéndose poco a poco a otros lugares.
En Coneja de la Luna, los potosinos podrán continuar con esta tradición gastronómica, por lo que el espacio que ofrece Olivia en su local es propicio para saborear el pulque al natural o alguno de sus curados. La intención es hacer un ambiente familiar, que, aunque la bebida solo es servida a mayores de edad, también se podrá conocer de los muchos beneficios que el llamado «Elixir de los dioses» ofrece para el que lo consume.
A continuación, te presentamos la entrevista completa con Olivia y su Coneja de la Luna:
https://www.youtube.com/watch?v=FuDkzr9I6YI