En una denuncia anónima a través de las redes sociales, supuestos ex integrantes de corporaciones de seguridad, destapan lo que ellos consideran como “La Caja de Pandora” en el tema del Robo de Vehículos, en los municipios de San Luis, Soledad, Villa de Reyes, Cerro de San Pedro.
Se dirigen al pueblo de San Luis Potosí, para explicar que son “un grupo de ex-policías municipales y ex Agentes del Ministerio Público comisionados al robo de vehículos en San Luis Potosí. Queremos hacerles llegar este mensaje a toda la ciudadanía respecto al tema del robo de vehículos que durante el año 2019 aumentó cerca del 100%”
El comunicado habla de la complicidad directa del Comandante de la Policía Municipal Edgar Oswaldo Jiménez Arcadia, algunos agentes de la Policía Vial y de fuerzas municipales de la capital potosina, así como también agentes del ministerio público y el Secretario de Seguridad Pública Jaime Ernesto Pineda Arteaga,
Aquí el texto integro de la Denuncia Anónima:
“…hay 5 bandas de personas provenientes del Estado de México, cada banda está integrada de entre 2 a 4 personas que son las encargadas de realizar el acto del robo, siempre con la complicidad de la policía municipal de la capital y la secretaria de seguridad pública del estado; por cada vehículo robado se da un pago de entre 5mil a 10mil pesos según el modelo del vehículo.
Inmediatamente son desvalijados quitando únicamente piezas servibles y caras en el mercado. Todas las piezas que se quitan son vendidas en los yonkes ubicado en la capital y Soledad de Graciano Sánchez, y los vehículos que son considerados del año o caros son sacados rápidamente del estado.
Se tiene como meta que al día se roben entre 10 a 15 vehículos, lo que en resumen da la cantidad de entre 100,000 a 150,000 pesos diarios lo que a la semana resulta mas de UN MILLON DE PESOS. Todo ese dinero se reparte directamente entre los comandantes de la policía municipal, policía vial, el secretario de seguridad y los elementos de las corporaciones involucrados.
También están involucrados directamente las empresas de Grúas Zarate y oro, las cuales casi el 80% del arrastre de los vehículos “SUPUESTAMENTE RECUPERADOS” son para ellos, así como como las pensiones propiedad de las empresas. Por cada vehículo reciben un pago de entre 500 a 600 pesos de arrastre más las cuotas por mantener el carro en la pensión.
Somos un grupo de ex agentes de la policía que fuimos dados de baja por no acatar órdenes de arriba en donde se nos ordenaba no implementar los operativos de búsqueda inmediata de los vehículos, así como también abrir calles para que los rateros pudieran facilitar su huida del lugar.
ES UN NEGOCIO REDONDO EL ROBO DE VEHICULOS EN SAN LUIS POTOSI.”