Desde el pasado mes de noviembre la policía de Australia ha investigado el origen de los incendios que han azotado a la nación. Aunque las temperaturas extremas que se han registrado así como la falta de lluvia contribuyeron a la expansión del fuego, la participación de ciudadanos irresponsables podría ser el origen de esta catástrofe natural.
Los medios de comunicación local informan que otras 24 personas fueron detenidas y acusadas de encender deliberadamente incendios forestales en Nueva Gales de Sur.
Esto se suma a la detención de 53 personas por presunta violación al incumplimiento de realizar fogatas. Según el informe otras 47 personas fueron absueltas por tirar colillas de cigarro en la localidad.
En el resto de la región se han realizado arrestos por cargos similares, en Australia del Sur al menos 10 sujetos han sido acusados de provocar incendios forestales intencionalmente.
Las perdidas materiales van en aumento y aunque las víctimas humanas mortales no ha incrementado, el mundo llora por los miles de animales calcinados así como terreno natural perdido. Se calcula que unas 8 millones de hectáreas han ardido durante los últimos meses y la cifra de animales muertos es cada día mas alarmante, según el ultimo reporte de la Universidad de Sydney se estima que 1,000 millones de animales han perecido. Expertos calculan que al menos tres especies de la región se encuentran ahora en peligro de extinción.
Los bomberos australianos siguen luchando contra las llamas , 130 focos se mantienen activos, la lluvia y disminución en la temperatura, dio un respiro a la población. Aunque se preve que el termómetro marque nuevamente mas de 40 grados en los próximos días.
