
En el año 1997, Netflix inició sus actividades. En aquel tiempo, era una especie de videoclub digital en el que solicitabas películas, se entregaban en tu casa, y posteriormente alguien acudía a En recogerlas. Hoy en 2019, la plataforma se ha convertido en una de las más importantes en el mercado del «streaming» y de la producción en todo el mundo.
En un principio, las casas productoras menospreciaron la industria del streaming, considerándola pasajera. Sin embargo, aunque no es rotundo, se podría considerar que en la actualidad va ganando la partida, pues la tecnología ha permitido un giro en la manera que los usuarios consumen material cinematográfico y musical.
Ya el año pasado la aclamada cinta «Roma» logró obtener tres premios (por mejor director, fotografía y mejor película de habla no inglesa), colándose de manera inesperada, y para sorpresa de muchos, entre los filmes de Hollywood. En este año se espera que más producciones de Netflix logren colocarse en la lista de galardonadas.
En la lista de las posibles candidatas a recibir estatuillas en este próximo año se encuentran El irlandés, Dolemite Is My Name, Historia de un matrimonio, Atlantique y Los dos papas.
Para muchos, Netflix cambió cien años de cine, impuso nuevas reglas y modificó otras, y llevó grandes estrenos hasta la comodidad de una cama o sofá dentro de su misma membresía.
Tomando en cuenta las grandes posibilidades que tiene la plataforma de streaming para posicionar no solo uno o dos, sino probablemente hasta cuatro de sus producciones en la lista de ganadoras del «trofeo dorado», sin duda demostrará lo que ya es perceptible: el cine ha cambiado. Y AppleTV+ y Disney+ lo saben, y están listas para entrar en la competencia.
En nuestra opinión, los premios Oscar de 2020 serán un parteaguas que delimitará «formalmente» el cambio en una era de la industria cinematográfica.