Luego de los sangrientos hechos registrados el pasado 4 de noviembre, en los cuales un total de nueve miembros de la familia LeBarón perdieron la vida, uno de los familiares reveló el pasado martes ante CNN que la familia ya ha sido víctima de los cárteles en muchas ocasiones.
Kendra Lee Miller, cuñada de Rhonita Maria Miller, una de las mujeres asesinadas en el ataque dijo: “Los carteles se han llevado a demasiados miembros de nuestra familia” y los asesinados el lunes “no fueron los primeros”.
Además reveló que su familia ha sido amenazada en las últimas fechas para advertirles acerca de adónde pueden viajar.
Sobre el ataque
Las víctimas del incidente del lunes incluyen tres mujeres, cuatro niños pequeños y dos bebés, declaró el miembro de la familia Alex LeBarón en México. Todos ellos contaban con la ciudadanía estadounidense, así como también la mexicana, reveló. Del ataque, ocho niños sobrevivieron.
Sobre el motivo del atentado, se dice que la familia LeBarón tenia asperezas con cárteles de la droga, así como con comunidades vecinas sobre los derechos del agua, lo cual se considera como indicios dentro de las hipótesis para determinar el móvil.
Aunque el Gobierno de México se ha pronunciado, y el Secretario de Seguridad Alfonso Durazo declaró que según sus investigaciones, la masacre se habría presentado debido a una confusión de la familia con grupos delictivos rivales, para los LeBarón está más que claro a que fue una emboscada; una venganza por el férreo activismo que algunos de los LeBarón realizan.
Sobre la familia
Los mormones que fueron atacados serían miembros de una secta fundamentalista que está separada de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (SUD), según informó un portavoz de la iglesia.
“Estamos desconsolados al escuchar la tragedia que ha afectado a estas familias en México”, declaró Eric Hawkins, portavoz de la iglesia a CNN. “Por lo que puedo decir, estos eran miembros de una secta polígama, y no miembros de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días”.
Kendra Lee Miller dijo que los miembros de la comunidad descendían de colonos mormones, y que algunos miembros todavía son practicantes de la iglesia.
Tiffany Langford, quien también perdió familiares en el ataque, dijo que no fue criada en la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, pero que ahora forma parte de ella.
“Nos amamos y apoyamos mutuamente sin importar nuestras creencias individuales. Nunca he visto tanta fuerza de unidad y amor en una familia tan grande como la nuestra. Esta es la tragedia de nuestras vidas”, declaró Langford.