Irwin un joven de 17 años, practica Parkour desde hace un año y medio. La mañana del sábado lo encontramos saltando y haciendo piruetas en el aire en compañía de cinco amigos a un costado de la Catedral Metropolitana. Este grupo de amigos saltaba entre las jardineras, a su manera respetaban a los transeúntes pues esperaban a que la calle estuviera despejada, el más hábil, se impulsaba contra un muro del inmueble considerado como monumento histórico.
Aunque ellos consideran no ofender ni molestar a la gente, existe gran inconformidad por parte de la sociedad que considera el Parkour como un daño al patrimonio arquitectónico que identifica a San Luis.
Irwin y sus amigos defienden su hobbie:
Qué es el Parkour?
Irwing: Es un deporte en el que debes desplazarte de un punto A a un punto B esquivando obstáculos y con la mayor agilidad posible.
Qué le puedes decir a las personas que no están de acuerdo con la práctica de Parkour en el Centro Histórico?
Irwing: Que no estamos dañando o haciendo algo malo, lo que estamos haciendo solamente es deporte. Hay diferentes opiniones al respecto, algunos transeúntes nos felicitan o nos preguntan cómo lo hacemos y hay gente que nos critica.
Esas críticas las dejó a un lado e intento concentrarme en lo que es el Parkour. Nos han corrido los policías y entendemos que es Patrimonio Cultural pero no estamos dañando alguna instalación o robando.
Acaso no hay lugares especiales para practicarlo?
Irwing: Hay gimnasios para practicar pero son algo costosos a nosotros nomás nos queda practicar aquí.
Se han acercado a las autoridades?
Irwing: Las autoridades no nos apoyan, nos hemos acercado y nos piden presentarles proyectos o ni siquiera nos reciben. Ojalá apoyen a los jóvenes que practicamos Parkour.
Y así como Irwing y sus amigos siguen esquivando las reglas solo para desfogar su energía, en la capitalina potosina existen decenas de grupos que ya comienzan a practicar Parkour porque es una actividad de moda sin que las autoridades los apoyen.
Seguiremos informando…