Arqueólogos chinos han realizado un importante hallazgo en la provincia de Shandong, en el este de China. Se trata de 34 tumbas pertenecientes a las dinastías Tang y Song (618-907 y 960-1279, respectivamente), que contienen numerosos espejos de bronce con intrincados relieves. Este descubrimiento representa la mayor colección de este tipo de objetos encontrada hasta ahora en el país asiático.
La excavación, ubicada en un cementerio en Yantai, permitirá a los expertos profundizar en el estudio de los usos funerarios y la evolución de las formas de enterramiento, así como comprender las connotaciones culturales y la estructura social desde la dinastía Tang hasta la Qing (1644-1911), según informa el diario Global Times.
El proyecto, liderado por Sun Zhaofeng, investigador del Museo de Yantai, revela que las tumbas fueron construidas de manera continua a lo largo de un extenso período de tiempo entre las dinastías Tang y Qing. Se han identificado varios tipos de construcciones en las tumbas descubiertas. Específicamente, las tumbas de las dinastías Tang y Song consisten en cámaras excavadas en la tierra, divididas en tres secciones: un pasadizo, una pared de ladrillo sellada y la propia cámara funeraria.
Sun explicó que este tipo de enterramientos no es común en Yantai debido a que su construcción no es fácilmente detectable. Por lo tanto, este hallazgo proporciona a los expertos una comprensión más profunda de estas estructuras, sus características y las diferencias entre las tumbas según el período al que pertenecen.
El descubrimiento de estas tumbas y los espejos de bronce en su interior brindan valiosos datos arqueológicos que enriquecerán la investigación sobre la historia y la cultura de las dinastías Tang y Song en China. El equipo de arqueólogos continuará su trabajo en el sitio para seguir desentrañando los misterios y revelaciones que estas tumbas ofrecen, aportando así nuevos conocimientos al patrimonio histórico de China.
